Traducción realizada por Ami Drutman, en base al artículo publicado en:
Saludos, yo soy Adrial,
un ser celestial de este universo. Estoy a bordo de la nave Athabantian desde
que ésta ha venido a asistir la transición de la Tierra.
Eres un hijo de Dios.
También eres Dios. Estas palabras pueden parecer contradictorias, pero a mi
nivel de funcionamiento, lo que ustedes denominarían la novena dimensión, vemos
ambas realidades.
Permítanme explicar más.
Ustedes, humanos de la Tierra, han sido creados como seres físicos para participar
en una experiencia física. Esto se hizo a través del esfuerzo conjunto de
vuestra alma superior (oversoul), Dios creador de este universo, y la Tierra.
En combinación, les han otorgado la fisicalidad de un humano que reside en la
superficie de la Tierra. Dar forma a un ser humano es fácil aun involucrado, ya
que ustedes son una entidad compleja.
Almas individuales para
una vida en particular, son el producto del alma superior, que individualiza a
cada alma a estar al servicio de un cuerpo físico en particular. El
revestimiento físico de vuestro cuerpo, que deriva de la genética de vuestros
parientes humanos, para así mantener el linaje de vuestra familia, ha sido
creado conjuntamente con la Tierra. Todo esto se realiza bajo la égida del Dios
creador de este universo.
Vuestra grandiosa alma
superior ha existido desde la creación de este universo. Cuando un universo es
creado por un Dios creador, se realiza en cooperación con las almas superiores que
ahora suministran almas para cuerpos humanos individuales.
Así que existe una
jerarquía que comienza con el Creador. Se extiende a los Dioses creadores y a
las almas superiores. Desde vuestra perspectiva, viéndolo más ampliamente si se
quiere, ven a la Tierra, al Creador Dios de este universo, y a vuestra propia
alma superior. Ustedes son un producto de los tres. De modo que es bastante
obvio que sean hijos de Dios.
En los reinos elevados,
todo fluye. No existen las delimitaciones claras como las hay en las densidades
inferiores de la forma. En los reinos elevados, la comunicación no es hablada,
imágenes y conceptos son transmitidos y la verdad es sabida, no tan sólo
creída. A pesar de que la Unidad y la verdad son fáciles de lograr, en el
terreno de la forma todo es rígido y la verdad es relativa.
Lo aprecien o no, ustedes
y yo estamos en Unidad. Ustedes son Uno con cada humano de la Tierra. Son Uno
con la Tierra, con sus animales, plantas, insectos, y rocas. Son Uno con el
resto del universo, y son Uno con otros universos. Inclusive son Uno con el
Creador. De forma que en Unicidad pueden ver que son Dios.
Aquellos de nosotros, de
dimensiones más elevadas, los estamos llamando para que se unan a nosotros en
la aventura más maravillosa. Nosotros los estamos llamando para que retornen
hacia donde vuestras almas superiores residen, desde donde han aceptado venir a
ese cuerpo. Vuestros hermanos y hermanas de Andrómeda y todos los demás
sistemas estelares, les pedimos elevar vuestras vibraciones para encontrarlos
en las dimensiones más altas. Han actuado en el drama de la tercera dimensión
por suficiente tiempo. Es hora de arrojar los disfraces basados en el miedo de
la tercera densidad.
Han interpretado bien
los roles que les han sido asignado; son felicitados por ello. No arrastren los
pies cuando el tiempo se aproxima, aprovechando que aquellos que se aferran a
la tercera densidad no estarán más sobre la Tierra. Las vibraciones de la
Tierra se están incrementando hasta el lugar en el que será imposible para
todos aquellos que no sean de la cuarta dimensión y más altas frecuencias.
El creador los está
llamando a la Unidad con él, con todo aquello que es. En esta unidad están
unidos con todo. En esta Unidad verán que son ilimitados, poderosos, y eternos.
En esta Unidad verán que son un Dios Creador.
Es ahora el momento de
vuestra decisión. ¿Escucharán la llamada de vuestra alma y retornarán a la
quinta densidad y más allá, reuniéndose en Unidad eternamente o, ignorarán los
cambios que están ocurriendo a vuestro alrededor y se aferrarán al confort, estatus,
riqueza, y seguridad de la tercera dimensión. La decisión es
vuestra.
Si desean avanzar
sinceramente, den la espalda a las tentaciones y seguridad de la tercera
dimensión. Abrácense a la ascensión de la Tierra. En la cuarta dimensión todos
experimentarán una existencia basada en el amor, como ninguna población actual
haya experimentado. Aún habrá oportunidad para la dualidad, pero vuestro drama
será actuado en un contexto basado en el amor.
Aquellos que elijan
permanecer en la tercera dimensión basada en el miedo, no ascenderán con la
Tierra. Serán reubicados en una situación similar en la que puedan continuar
encarnando hasta que decidan ascender a las dimensiones superiores, llenas de
luz.
Al elegir moverse hacia
una densidad llena de luz, están liberando vuestra alma de las múltiples
reencarnaciones que han experimentado. Es vuestra decisión. Escuchen el mensaje
de vuestra alma a explorar las más elevadas densidades llenas de amor. Escuchen
los mensajes de vuestras almas a abrazar lo que son realmente, un ser magnífico
que se mantiene cautivo en la tercera dimensión. Escuchen a vuestra alma que
los invita a la quinta dimensión, instándolos a que decidan moverse de su zona
de confort.
Si ascienden, no dependan
de mensajes del exterior; vayan al interior. Muchos mensajes que reciben se
encuentran en conflicto, instándolos a mirar aquí o allá por la verdad. No
necesitan mirar más allá de vuestro corazón para hallar la verdad. Los muchos
eventos que giran a vuestro alrededor, son la distracción final en vuestro
camino a las densidades más ligeras. Ignórenlos y enfóquense
en vuestro interior.
Como has experimentado
recientemente, Mark, cualquier atractivo de la tercera dimensión queda
totalmente ensombrecido por la existencia en la quinta dimensión. Aférrate a
esa realización. Muchos están deseando darles la bienvenida permanentemente a
las densidades más elevadas. Por los contratos antes de nacer, han aceptado entrar
a vuestra alma individual en este cuerpo físico. Además, han acordado olvidar
todo lo que sabían antes de nacer, y comenzar el largo proceso de redescubrir
quiénes son realmente. Esto se aplica de forma indistinta a todos aquellos que
están leyendo estos mensajes y a aquellos que ni siquiera saben de la
existencia de estos mensajes. Todos los humanos han hecho esos
acuerdos.
Hay muchos que no han
despertado; se aferran a las creencias de la tercera dimensión. Ya que deciden
hacerlo, repetirán las lecciones de la tercera dimensión, una y otra vez, por
muchos años. Ahora que han emergido de la oscuridad de la tercera dimensión, y
comienzan a apreciar quiénes son realmente, deben felicitarse a ustedes mismos.
Aquellos de ustedes que
ya residen en la cuarta dimensión, han elevado vuestras vibraciones al punto
que no se basan en el miedo. Deben ser felicitados. Más importante aún, han de
honrarse a ustedes mismo. Cada uno de ustedes debe estar agradecido porque han
emergido de la esclavitud de la tercera dimensión. Aprecien lo que han logrado.
Alégrense, que ahora caminarán junto a la nueva Tierra. Vuestra alma superior
espera el momento en el que pueda reunirse con ustedes plenamente, en las dimensiones
más elevadas.
El universo en Unidad,
espera vuestra ascensión. Estén agradecidos que han tomado el camino menos
transitado y han accedido a ascender. Muchos de ustedes que leen estos
mensajes, han invertido tiempo y esfuerzo agradeciendo a Dios, y a otros que
los han asistido en vuestro despertar. Ahora es el momento de reconocer vuestra
propia grandeza y agradecer a ustedes mismos por lo que han logrado. Aprecien y sean agradecidos.
Espero poder interactuar
con ustedes a medida que llegan a vuestro destino. Yo soy Adrial, un ser
celestial de este universo.